sábado, junio 03, 2006
Miedo
10:13 p. m. | Publicado por
Paloma Otero |
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Como un Calígula triunfante alardeas:
“No me importa que me odien,
mientras me teman”
Tú, que no eres nada porque nada tienes, y
lo eres todo por ser de rabia
y cuando empiezo a hablar.
Y cuando empiezo a hablar,
y a entender
que la Vida no vive conviviendo contigo
que, arrastrando el mal, ¿dónde está lo bueno?
no lo entiendo.
Y que no entiendo que sin ser querido, igualmente,
engendres y engendres y engendres
y mucho dolor porque te reproduces.
Más rápido que el uno, que el dos
mucho más rápido que el fuego
y así;
odiándote y temiéndote tiemblo todavía,
cáncer, que habitas entre mis comas
mientras van pasando mis horas.
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